Los misterios de Peñablanca

La mayoría de los acontecimientos tienen un lado difícil. Es bueno analizar de donde viene y por qué se produce Primeramente debemos preguntarnos. ¿A quién le conviene desacreditar esta Aparición? La respuesta es evidente. Al demonio. Él trata de impedir a toda costa que aumente el fervor, que se produzcan conversiones y cambios de vida. Si la Aparición fuera una falsedad o viniera de su parte¿piensan ustedes que la combatiría?

Ahora bien debemos reconocer que en Peñablanca ha habido mucha confusión.

Empezamos analizando las dos investigaciones que ordenó hacer el Arzobispo de Valparaíso. La primera comisión estuvo integrada por un conjunto de personas sin ninguna experiencia y de conclusiones muy precipitadas. En ese tiempo en Chile había una situación difícil. Muchas marchas de protestas y de desconfianza de unos con otros.

Esta comisión encontró en el Cerro, personas pertenecientes al C.N.I. (Policía chilena). Rápidamente llegaron a la conclusión que era una trama armada por el Gobierno para distraer la atención de las dificultades que tenían en esos momentos. Nunca pudieron hasta ahora probar esa hipótesis. Y en sus mensajes la Santísima Virgen hace un llamado a los dos lados (militares y civiles) a “abstenerse de sus crímenes, pues mueren muchos inocentes”.

La comisión nombrada no estuvo más de dos meses estudiando el fenómeno (Septiembre y Octubre de 1983). Ya en Octubre el Arzobispo emite una declaración fuertemente crítica y solicita a los sacerdotes y fieles no asistir al Cerro. Como los creyentes pidieron al Arzobispo, Monseñor Francisco de Borja que se hiciera un estudio más acucioso, nombró una segunda comisión formada por cuatro profesores de la Universidad Católica. Estos partieron ya con la idea que todo era falso y habiendo tenido lugar más de300 apariciones, apenas asistieron a cinco de ellas. Empezaron su estudio en el mes de Abril de 1984 y ya a fines de Agosto habían llegado a la conclusión que todo era falso. Que detrás del vidente había un grupo que manejaba todo. Pero nunca se pudo encontrar a ese grupo ni mostrar su veracidad. Las personas que asistían a las Apariciones, declararon que era totalmente imposible, pues se conocía los hogares que frecuentaba el vidente y las personas que lo rodeaban.

Hasta el día de hoy no aparece el pseudo grupo. Esta comisión apenas interrogóa dos o tres personas a pesar de que había mucha gente dispuesta a dar su testimonio. Después de estas declaraciones no faltaron quienes se unieron para decir que todo era falso. Los enemigos de siempre de la Iglesia que buscan cualquier oportunidad para dañarla. Unos alegaron que estaba relacionado con espiritismo y ocultismo. Decían que el vidente entraba en un trance hipnótico y que contagiaba a los asistentes, hipótesis que no tiene ningún asidero.

También se hablaba que el vidente era un mitómano. ¿Creería alguien capaz de pensar que este muchacho de tan poca cultura podría inventar esos mensajes tan sublimes o habérselos aprendido de memoria y estar cuatro o cinco horas trasmitiéndolos? Tendría que ser un muchacho superdotado, lo que no es en absoluto. Al contrario es un muchacho rústico y de pocos conocimientos.

También se acusó a la Virgen que era Milenarista o Lefebrista porque defendía las tradiciones. Así todas las teorías que se fueron presentando se desvanecieron solas. A pesar de eso aún hoy día algunos ignorantes las siguen repitiendo. Inventaban cosas tan absurdas, como que los prodigios que se veían en el cielo eran producidos por aviones, que los rayos que caían eran sofisticados arreglos eléctricos. Y una tras otra se fueron buscando excusas para desacreditar las Apariciones, pero sin poder demostrar ninguna de esas teorías. No se creía ni en las curaciones, ni en los testimonios de perfumes, en las danzas del sol, ni en las fotografías inexplicables, a pesar de que en esos años no se tenía la opción de hacer trucos como sucede actualmente. Ahora bien hubo algo muy curioso y que Alejandro Cifuentes Bezanilla, Ingeniero Civil, creyente fiel de estas apariciones(Q.E.P.D),fue testigo involuntario.

Al comienzo nombraron como investigador al Padre Jaime Fernandez Montero, quien al mes de investigación declaraba que la Aparición tenía muchos visos de ser auténtica. Repentinamente tuvo un brusco cambio declarando que era falsa. ¿Qué había pasado? Alejandro Cifuentes viajó a Viña del Mar, al Santuario de Schoenstant para dar al Padre Fernández su testimonio de la Reja del Santuario, por la cual el mismo padre se había mostrado interesado. Al llegar le dijeron que debía esperar porque iba a celebrar la santa misa. Efectivamente, salió el Padre Fernández, pero estaba completamente demudado. Se notaba que había recibido una fuerte impresión. Incluso se saltó partes de la Misa.

Al terminar Alejandro Cifuentes se le acercó a darle su testimonio, pero no manifestó mayor interés y se veía que estaba fuertemente choqueado. Después se supo el por qué. Alguien telefónicamente lo había amenazado de muerte si declaraba que la Aparición era falsa. ¿Quién hizo el llamado? Nunca se ha sabido, seguramente alguien  instigado por el demonio pero para él fue el golpe de gracia para mostrar que todo era una falsedad.

Alguien ideó este diabólico plan que impidió que el sacerdote siguiera investigando. Como podemos ver una tras otra han ido surgiendo los escollos para que la Aparición no pueda seguir su camino expedito y llegar a un mayor número de personas.

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